Tan corta la palabra, tan inmenso su definir, pura sencillez que dá vida por doquier.

Resurge el hálito de vida entre los abrazos del horizonte, llaman sus brazos de fuego la sinfonía emplumada…el andar de prisa y los colores de la vida.

Nace la oportunidad de existir tal cual como es preciso…y el viento… que arrulla en su regazo el amanecer.

* Y te veo mordiendo el aire con el astro padre en mi alma rota…

…la esperanza manifiesta en el fin de la tiniebla, deshechas tus angustias en la nueva oportunidad del existir.

* Existir entre la vida y el amor…dar paz y mirar con el cielo en las oportunidades…

…la única luz posible en éste ensombrecido camino de desdichas, la terca voluntad.
Christian E. Castiblanco, Colombia en versos
* Colaboración María Camila Martinez Cardona
Fotografías: Valle de Sopó, Colombia
Que linda tu entrada, sus imágenes, sus letras…
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Gracias por tomarte el tiempo de visitarme y leernos☺️
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Reblogueó esto en RELATOS Y COLUMNAS.
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Gracias por difundir
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De nada, encantado!.
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No hay cuatro palabras que signifiquen tanto. Unas bellas palabras.
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Es inmensa en su pequeñez…gracias por tu visita.
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