Mujeres Versos, el diario de Gaby

Gaby Ponce desde Ecuador con su lente poético nos deja retratos de versos que desnudan sensaciones de esperanzas que parecían perdidas, luz que desvela la perturbante cotidianidad, le da color a esos días grises de afán insensato de ojos que no dicen nada. Remembranzas de ayeres, amores de antaño que siguen latentes. Le da vida al poema, lo personifica de tal manera que es su confidente…su cómplice. En su ultimo canto irradia la hermosura del dolor de los amores inusuales… ademas nos regala fotos inéditas de su otra faceta como fotógrafa…una caja de sorpresas. Poesía y belleza natural

Bienvenid@s al diario de Gaby

…Tan solo somos un presentimiento

BIG BANG

Afloran precipicios, en el despertar de  los espejos

Alicia cosecha instantes

tras una procesión de corsarios de mar

avatares, que transponen metáforas.   

Mañanas silenciosas, con espejos rotos

reductos de sílice,

en el borde de los instantes

cuando el corazón se triza

y las manos se vacían.

Alicia busca su sombra

en una minúscula partícula de arena,

que contiene,

su corazón roto

 y toda la historia de la humanidad.

LEVANTAR EL VUELO

Seis am.

Camino en puntillas, por este campo de amapolas

Recojo colores

esos que quedaron prendidos en las

paredes de esta habitación.

Camino en puntillas y

Tropiezo con tu colección acetatos,

epitafios

y canciones de los Rolling Stones.

Seis y diez.

Tomo de tu velador

ese verso trasnochado

que soltaste en un despiste,

a cambio te dejo

la manzana más hermosa del jardín,

partida en la mitad

y sin corazón

Seis y veinte.

Busco la llave,

para salir

a un  mundo

que se estrella entre semáforos,

pasos apurados,

ojos que no dicen nada

y gente que nunca tiene tiempo.

Seis y treinta.

Cierro la puerta

Arrojo la llave.

Aquí, afuera

una pájara escapa de la jaula.

Y tú? ….

Tú roncas.

Dame para olvidar un sitio menos gris

Madrid. La fuga.

REMAKE

He quemado las amarras que te unían a este puerto
he fundido, uno a uno,
los clavos que dejaste en mis manos 
he perdido el único poema que te codiciaba.

Derramé salmos, salves,

agua de ruda 
y por si acaso,

agua bendita de las siete iglesias 
sobre todos los rincones de tu esperanza.

Todo esto
para
ahora encontrarte 
en los estropeados suspiros 
que doblan la esquina 
cuando suena el soundtrack 
de las noches

que dejase en el tintero.

Buen pretexto, 
buen pellizco,

perversa lúdica de Cronos,

–remake– 
para recordarme,
que esta ciudad 
todavía me suena a vos.

POEMA

El poema me persigue,

me escapo,

el poema me empuña,

me mutila,

a pesar de todo sigo viva.

El poema se enclaustra en mi poca noche

y en un pronto amanecer me suspira.

El poema,

duerme,

late,

gesticula entre mis pasos,

quedo impávida.

El poema,

no me encuentra 

y ahora yo lo busco.

Estrujo al poema y lo guardo

en la solapa de algún libro calientito.

Conciliamos treguas,

perdonamos olvidos

y sonrojamos en risas.

Aún lo conservo en estas páginas

donde

él y yo

soñamos

nuestra pronta muerte.   

PESADILLA, ANTES QUE LLEGUE EL INVIERNO.

Eduardo Manos de Tijera -no Johnny Depp- Eduardo Manos de Tijera

con su cara triste en lo alto del muro de piedra,

en una ciudad perdida y recurrente de mis extrañas pesadillas.

Corro por el muro,

hacia sus puntiagudas manos

antes de llegar,

caigo.

Se escucha:

un grito,

Se siente:

el vacío,

Se mira:

la sangre,

Duele:

la herida,

su cara triste,

la espera del impacto

y mi abrazo, en sus cuchillas.

Gaby Ponce, Ecuador

Edición y recopilación: Christian E. Castiblanco